jueves, 17 de mayo de 2018

Deuda externa argentina: el siglo XIX y los antecedentes - Parte 2

Después de Caseros, el grupo Mitrista que pasa a controlar la provincia de Buenos Aires se preocupa por arreglar las cuentas: se envía a Norberto de la Riesta a Londres para la renegociación. De la Riesta reconoce una deuda en concepto de capital más intereses, más intereses de intereses, elevando la deuda a la módica suma de 2.618.000 libras.

Ya con la organización nacional, cuando el Mitrismo necesita financiación para Guerra de La Triple Alianza, envía nuevamente a de la Riesta a Londres en busca de nuevos fondos. Este obtiene allí un nuevo empréstito por 2.500.000 libras cuyos títulos se colocan en su mayor parte a 72,5% y que restado sus gastos y comisiones deja un remanente de 1.735.703 libras.

Al concluir la Presidencia de Mitre la deuda externa se haya cercana a los cinco millones de libras esterlinas.

Su sucesor, Domingo Sarmiento, también toma fondos externos; el fin seguiría siendo la estructuración del país. Sin embargo la facilidad de obtener crédito a bajo precio estímulo extraordinariamente el comercio y la especulación en todas las clases sociales, ocasionando una ficticia suba de precios. La especulación se dio principalmente sobre la propiedad raíz, el efecto ingreso de este auge ficticio llevo a un desmesurado aumento de las importaciones. Con un importante déficit de balanza de pagos, el oro comenzó a exportarse en marzo de 1873 cuando comenzó a hacerse sentir la crisis.

En 1874, al culminar el período presidencial de Sarmiento, puede estimarse que la deuda externa oscila alrededor de 14.500.000 de libras y el pago de los servicios anuales por amortización e intereses constituye ya un ítem importante en el presupuesto del Estado.

La crisis promovida por la gran abundancia de capitales introducidos al país por medio de empréstitos culmina en 1876 durante el Gobierno de Nicolás Avellaneda.

De esta forma, podemos observar que la toma de crédito para estimular el desarrollo económico del país se repite cíclicamente: “El desarrollo económico de la Argentina en el siglo XIX fue financiado con préstamos del mercado mundial de capitales”.

Ya durante el mandato de Roca, argentina en 1881 promulga importantes reformas monetarias a fin de remediar las repetitivas situaciones caóticas en que se había visto el circulante.

La principal medida fue la fijación de un nuevo peso oro. Argentina volvió así formalmente al patrón oro: “A fines de 1883, la argentina tenía por primera vez un sistema monetario practicable” 3.

Durante su mandato comienza un programa para colonizar nuevas tierras, expansión que requería el desarrollo económico; circunstancia tal que derivó en un desmesurado aumento de los préstamos.


No hay comentarios.:

Publicar un comentario