miércoles, 27 de abril de 2011

Vicepresidencia de Víctor Martínez (1983-1989) - parte 2

En el seno del Poder Ejecutivo, Martínez actuó principalmente desde la sombra, reuniéndose semanalmente con Alfonsín (aunque nunca fue invitado a participar de las reuniones de gabinete) para discutir acerca del desempeño del gobierno y la marcha de la situación nacional (Castro, 2009: 326), y representando al Estado en ceremonias y situaciones protocolarias, generalmente de segundo orden.
En todos los casos, la actividad de Martínez estuvo jalonada por ser realizada siguiendo sin excepción las directivas del primer mandatario.
En el Senado, en cambio, el primer vicepresidente de la nueva era democrática tuvo un mayor protagonismo. En primer lugar porque se encontró con una Cámara completamente abandonada, de modo que fue, como presidente de ésta, el responsable de devolverla al orden y al buen funcionamiento (lo cual implicó realizar una gran cantidad de nombramientos de personal, la restauración del mobiliario y la puesta en marcha del engranaje administrativo, entre otras cosas).

En segundo lugar, porque la lealtad a Alfonsín se materializó repetidamente en la participación en duras negociaciones con la mayoría opositora para lograr que se aprobaran proyectos de vital importancia para el gobierno.
Fuera de los límites del Poder Ejecutivo y del Senado, el vicepresidente de Alfonsín no utilizó sus años de mandato para acaparar protagonismo en los medios de comunicación (sus apariciones en la prensa fueron exiguas); ni para crecer dentro de la política partidaria (por el contrario, criticaba a Alfonsín que ejerciera la presidencia de la UCR y la de la Nación al mismo tiempo); ni para construir una base de apoyo que le permitiera luego proyectarse hacia otros cargos públicos de similar o mayor envergadura.

Por el contrario, el único puesto que desempeñó tras su paso por la vicepresidencia fue, una década después de abandonar el poder, el de embajador en Perú durante el gobierno de la Alianza (1999-2001).
Martínez transitó su mandato sin conflictos con Alfonsín: si bien existían diferencias ideológicas entre ambos, el vicepresidente se ocupó siempre de resolverlas en la intimidad.

CLAROSCUROS EN LA CÚSPIDE DEL PODER. LOS VICEPRESIDENTES ARGENTINOS (1983-2009)
ARIEL D. SRIBMAN
Universidad de Salamanca
sribman.ibero@usal.es

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