Los estudiantes se movilizan y entregan un petitorio a los legisladores solicitando el retiro del proyecto. Los diarios oficialistas La Tribuna y El País son blanco de agresiones. Lo mismo sucede con las residencias de Roca y Pellegrini. Los disturbios continúan en Plaza de Mayo, donde se congregan unas dos mil personas, entre ellas muchos estudiantes. Esta serie de acontecimientos, que comienza el 1 de julio, culmina con la decisión de declarar el estado de sitio en el país.
Tras estos sucesos Roca decide retirar el proyecto y no le comunica su decisión a Pellegrini. Esto provoca que Pellegrini decida romper una alianza política que los había unido por mucho tiempo.
El mitrismo desató una oposición general que alcanzó grandes proporciones en la Capital. Pellegrini, gestor y defensor del proyecto de unificación en el Senado, empeñó todo su esfuerzo para obtener su aprobación parlamentaria, a pedido de Roca. Sin embargo, cuando el presidente midió la importancia de los tumultos –de tal gravedad que decretó el estado de sitio– retiró del Senado el pliego del proyecto y dejó a Pellegrini en incómoda situación. Esto ocasionó la ruptura política entre ambos y la definitiva fisura del viejo Partido Autonomista Nacional.
(Ramos, 2006)
Estos hechos producirían la fractura del Partido Autonomista Nacional. Por un lado, quedarían los autonomistas nacionales o roquistas y por el otro, los autonomistas (a secas) o pellegrinistas, críticos del sistema electoral y más cerca de los movimientos anarquistas, radicales y populares. Vale decir que dentro del conservadurismo los pellegrinistas conformaban un colectivo en el que también se alistaban otras fuerzas políticas, influenciadas por los flujos inmigratorios de Europa, como los anarquistas y los socialistas.
En este marco el ala reformista de los pellegrinistas abogaba, sobre todo, por una reforma electoral que terminara con el fraude.
La tapa de la Revista Caras y Caretas del 5 de marzo de 1904 presenta una sutil parodia de una supuesta clase de nefrología en la que Carlos Pellegrini muestra, en base a la forma del cráneo de Julio A. Roca, sus desmedidas ambiciones de poder, lo que se reflejará en la campaña política, y en las prácticas fraudulentas de las elecciones de ese mismo año.
Fue creciendo entre los miembros más lúcidos de la élite la idea de realizar cambios institucionales a nivel político, frente a la amenaza que representaban los levantamientos radicales y la aparición de otras fuerza opositoras fuera de control. Surgió así en el marco de esa oligarquía un sector reformista, encabezado por José Figueroa Alcorta y Roque Sáenz Peña, que sentaría las bases para esa reforma electoral.
(Rapoport, 2010)
La reforma electoral es el resultado del advenimiento de otras fuerzas sociales enmarcadas y representadas por la inmigración europea, gestándose de esta manera una nueva cosmovisión y práctica política.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario