Agudo observador de la realidad
argentina escribió: “La dificultad no consiste en saber cómo pagar la
deuda, sino en cómo hacer para no aumentarla. (…) En los países nuevos en que
la habilidad abunda más que el juicio, se da frecuentemente el nombre de
empréstitos para obras públicas a lo que en realidad son obras públicas para
empréstitos. Así tan pronto como el empréstito es conseguido, la obra pública
queda sin objeto. Cuanto más irrealizable mejor sirve la obra a su objeto, que
es el empréstito en sí mismo, no la obra”. 3
En 1879 una alianza entre Roca y
Avellaneda lanzó la candidatura de Alberdi a diputado nacional. Llegó a Buenos
Aires el 16 de septiembre de aquel año y tuvo una participación decisiva en los
debates parlamentarios sobre la Ley de Federalización de Buenos Aires, que le
dio finalmente una Capital Federal a la República. El senado, bajo la presión
mitrista, rechazó el proyecto de publicación de sus obras completas y su
nombramiento como embajador en Francia. Le estaban cobrando su militancia
contra la guerra del Paraguay, entre otras cosas. Cansado y humillado decidió
alejarse definitivamente del país.
Partió rumbo a Francia el 3 de
agosto de 1881 confesándole a un amigo "lo que me aflige es la
soledad". Murió en Nueilly-Sur-Seine, cerca de París el 19 de junio de
1884.
3 Juan Bautista Alberdi, Obras completas, Tomo VIII, Buenos Aires, 1887.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario